¿Perlas en la leche?
¡Ah claro! A esto debe de ser a lo que se refieren cuando dicen que la leche materna es maravillosa.
Bueno, siento decepcionarte. Pero estas perlas poco tienen que ver con las perlas preciosas y brillantes que lucen las mujeres en sus collares.
Estas perlas son muy distintas.
Lejos de simbolizar belleza, más bien nos dan algún que otro quebradero de cabeza.
Tú y tu bebe os encontráis disfrutando plácidamente de vuestra lactancia, y de repente, así casi por arte de magia, observas un puntito redondeado sobre la superficie de tu pezón.
Y atención porque no viene solo.
Con la visita de este amigo inesperado, aparece también el dolor.
¿Qué es esto te preguntas?
Parece un grano…
¿Un grano en el pezón?
¡Tachán!?
Te presento a las perlas de leche materna.
Como te comentaba al principio, no te dejes seducir por su nombre, que de bonitas estas perlas tienen poco.
En este artículo te voy a explicar qué son las perlas de leche en el pezón, qué tipos hay, cuáles son sus síntomas, cómo se puede hacer que desaparezcan de una vez por todas.
¿Lista?
¡Comenzamos! ?
¿Qué vas a encontrar aquí?
¿Qué son las perlas de leche materna y por qué aparecen?
La glándula mamaria está constituida por distintas estructuras.
Los lóbulos mamarios, que se disponen alrededor del pecho como si fueran los pétalos de una margarita. Estos lóbulos, contienen en su interior los lobulillos o alvéolos mamarios, que son algo así como la GRAN fábrica de leche.
¿Te suena a chino?
No te preocupes, en la siguiente imagen lo verás más claro.
Las perlas de leche aparecen cuando los conductos que se encargan de transportar la leche desde los alvéolos hacia el pezón se obstruyen. En lugar de salir al exterior, la leche se acumula y espesa en el interior de estos conductos, y forma un puntito de aspecto nacarado y brillante en la superficie del pezón.
Tipos de perlas de leche en el pezón
Ojo, porque no todas las perlas de leche son iguales. En función de la causa o el motivo por el que han aparecido las podemos dividir en:
1. Perlas de leche por tracción
Se caracterizan por la presencia de un puntito blanco, brillante y muy redondeado sobre la superficie del pezón.Normalmente estas pequeñas perlas, aparecen por factores mecánicos. Es decir, tras sufrir pequeños mordiscos, porque el bebé realice movimientos bruscos, como cerrar la boca con fuerza o tirar del pezón durante la toma. Aunque son menos habituales, también pueden aparecer tras sufrir una lesión o fuerte golpe en la zona.
Suelen tratarse de obstrucciones muy superficiales que se resuelven generalmente sin mayores complicaciones entre 5 o 7 días.
2. Perlas de leche por infección
Se observa un puntito amarillento y de forma irregular sobre la superficie del pezón.
A diferencia de las anteriores, estas perlas son de otro nivel.
Se deben a la presencia de una infección en la glándula mamaria y deben de ser tratadas con mucho cuidado.
A veces, durante la lactancia, se producen alteraciones en la microbiota natural de la mama, es decir, los microorganismos y bichitos que viven habitualmente en ella.
Estos cambios pueden favorecer el crecimiento de otras bacterias no tan amigables, que se van adhiriendo unas a otras formando una especie de tapón o biofilm. Esto provoca que tanto los conductos, como otras estructuras se inflamen y dificulten el paso de la leche al exterior.
Generalmente, se trata de obstrucciones mucho más profundas, que suelen, además, relacionarse con la presencia de una mastitis de tipo subagudo.
Si quieres saber más sobre este tipo de mastitis te lo cuento en este artículo.
Síntomas de las perlas de leche
Puede que tengas dudas y no sepas cómo identificar si se trata (o no) de una perla de leche. Vamos a ver cuáles son los síntomas más comunes.
1. Presencia de un puntito en la superficie del pezón
Como te comenté anteriormente, la forma y el color de este puntito varía en función del tipo de perla.
Las de tracción son blancas y redondeadas mientras que las perlas por infección tienen un ligero color amarillento y una forma más irregular.
Generalmente suelen aumentar su tamaño durante la toma, volviéndose mucho más evidentes. Y tras esta, disminuyen de nuevo recuperando su tamaño y aspecto original.
2. Presencia de un dolor punzante e intenso
Muchas mujeres lo describen también como una sensación de quemazón penetrante que hace que las tomas se vuelvan muy incómodas.
Perlas de leche y su tratamiento: ¿Cómo diablos me deshago de ellas?
Lo primero y más importante, es valorar la causa, es decir, determinar de qué tipo de perla de leche se trata, ya que el manejo de una u otra será diferente.
Pautas comunes a ambas
1.Se debe valorar la presencia de dolor
- En el caso de que no genere molestias durante la toma, lo más recomendable es esperar y valorar su evolución. Ya que muchas veces la propia succión del bebé permite que se resuelvan solas en un par de semanas.
- Si, por el contrario, las tomas se han vuelto dolorosas e incómodas, se deben llevar a cabo medidas adicionales para resolverlas.
Es importante tomar medidas para aliviar dicho dolor. A día de hoy, existen muchísimos tratamientos analgésicos y antinflamatorios totalmente seguros y compatibles con la lactancia materna.Te dejo la web E-lactancia para que puedas consultar tus opciones en caso de que lo necesites.
2. Se debe valorar la técnica de lactancia
Prestar mucha atención a la posición y el agarre.
Asegúrate de realizar tomas frecuentes, variando de posición para favorecer el drenaje del pecho.
Pautas para el manejo de las perlas por tracción
Ante este tipo de perlas se puede:
1. Aplicar calor en la zona antes de cada toma
Esto sirve para ayudar a dilatar los conductos y que la propia succión del bebe al pecho favorezca su desaparición.
2. Sumergir el pecho en un recipiente que contenga agua caliente durante un par de minutos
A continuación, seca la zona frotando con una toalla limpia. Con la ayuda de los dedos presiona ligeramente, con mucho cuidado, sobre los laterales para favorecer la salida del contenido.
Si, exactamente igual que si estuvieses explotando una espinilla.
No te voy a engañar, resulta bastante molesto, pero en algunos casos esta técnica resulta muy efectiva.
3. Intentar extraer el contenido con la ayuda de una aguja estéril
Yo no soy muy partidaria de que lo realices tú misma en casa.
Primero, porque como ya te he dicho, puede resultar bastante molesto y segundo, porque es necesario garantizar que se realiza siguiendo unas medidas de higiene determinadas para evitar infecciones a posteriori.
Por eso, te recomiendo que te pongas en contacto con tu matrona o personal sanitario para que valoren el problema, confirmen que efectivamente se trata de una perla por tracción y si es necesario realicen ellos mismos la extracción.
Una vez retirado el contenido, se recomienda limpiar bien la zona con agua y jabón neutro varias veces al día, y dejar secar la zona al aire.
Pautas para el manejo de perlas infecciosas
A diferencia de las anteriores, lo más recomendable ante la presencia de una perla infecciosa es no manipularlas ni pincharlas.
Debes tener en cuenta, que lo que observas en la superficie del pezón, es tan sólo la pequeña parte visible del problema que realmente se esconde en el interior.
Es como observar la punta de un iceberg.
A simple vista, puede parecernos pequeño, incluso insignificante, y, sin embargo, una vez te sumerges en el interior del océano y observas la imagen al completo, te das cuenta de su increíble magnitud.
Pues lo mismo sucede con este tipo de perlas, así que debemos tratarlas con guantes de seda.
1. Mi consejo
Es que te pongas en contacto con un profesional especializado en lactancia para que valoren el problema y te proporcionen un plan de acción personalizado.
2. Realizar un cultivo de leche
Puede resultar muy beneficioso, ya que no solo confirmar la presencia de infección, sino que, además, puede orientarnos mejor hacia cuál será el tratamiento antibiótico más efectivo en cada caso.
3. Uso de probióticos específicos
Se ha visto, que el uso de probióticos específicos para la lactancia resulta bastante efectivo para tratar este tipo de perlas.
Consejos finales
La lactancia tiene innumerables beneficios, pero no es algo fácil.
Como hemos visto a lo largo del artículo, las perlas de leche en el pezón son un poco complejas. En caso de duda consulta con un especialista.
Como siempre digo, asegúrate de que esa persona está especializada en lactancia materna y se ha reciclado recientemente. Al igual que hay pediatras que siguen recomendando a día de hoy los cerealitos, no por el hecho de ser médico, enfermera ni matrona se tienen conocimientos de lactancia materna. Porque lo que se da en la universidad son conceptos muy básicos.
Si tienes alguna duda y quieres que te ayude a resolver este problema, mira esto.
Si quieres aprender las bases para disfrutar de la lactancia, puedes apuntarte gratis a un mini-curso (por email) que he preparado para las suscriptoras. Puedes apuntarte en el cajetín que hay debajo del artículo. En esta página tienes toda información.
Si te apuntas recibirás un consejo diario para que si quieres dar el pecho a tu bebé puedas lograrlo más fácilmente.
Una cosa que quiero aclarar, dar el pecho es sencillo, pero no es fácil. Vas a necesitar dedicar un poco de tiempo a leer los emails que te mando y poner en práctica esas técnicas. Si quieres resultados inmediatos y no estás dispuesta a dedicar ese tiempo, es mejor que no te apuntes porque no te ayudará.
Cuéntame en los comentarios qué te ha parecido el artículo. ¿Conocías las perlas de leche materna? ¿Las has sufrido?
Soy madre y matrona.
Mi objetivo es dar a las madres la información y atención necesarias para que se sientan tranquilas y disfruten de una experiencia única e irrepetible.
Hola!!!
Yo tengo hace 8 años una perla de leche y nunca me ha dado problemas hasta antes d ayer que sentí un dolor intenso en la mama donde la tengo. Me fui al médico y me dijeron que me pusiera calor y tomara ibuprofeno, pero hoy está irregular y de color amarillento, estoy muy asustada y no sé qué hacer porque como voy a eliminar eso de ahí con los años que lleva y me puede provocar una infección grande….si me puedes ayudar…
Gracias!!
Saludos
Muchas gracias, me resultó bastante útil el artículo, Mañana veo a la puericultura ya que tengo perla en ambos pezones, en uno me duele fatal y en el otro no,
Hola Rocío, me alegro que te haya ayudado! Genial espero que te ayude a solucionar el problema.
Hola tengo todos los síntomas pero no veo ninguna perla, sé cómo sol por qué me pasó con mi primer hijo y lo resolví como dices allí, pero ya tengo dos días con dolor de cuerpo articulaciones y me duele horrible el pecho solo de rodarlo y Amantar es como pullas, cómo saber dónde está si no la veo por ninguna parte
Hola Angélica, podría ser perla o mastitis. Si tienes dolor te recomiendo que busques una matrona o asesora de lactancia por tu zona para que puedan valorar bien que está pasando. Un abrazo
Si tienes una perla de leche, puedes dar el pecho?
Hola María,
Sí. Se puede dar el pecho. En el artículo te dejo las pautas para diferenciar el tipo de perla y tener en cuenta que puedes hacer para que desaparezca.
Muy buenas.Llevo dos días con una perla blanca y redonda en un pezón. Ese pecho se me pone duro con frecuencia pero apenas me duele vaya. Me he quedado más tranquila leyéndote. A ver si aplicando calor y masajeando logro que desaparezca
Hola María, me alegro que te haya ayudado el post de las perlas de leche. Un abrazo