Uno de los mayores retos con los que se encuentran los papás y mamás, especialmente si son primerizos, es entender las necesidades de su bebé.
Muchos se llevan las manos a la cabeza y se preguntan: «¿Por qué llora ahora?, ¿Será que tiene hambre?»
Desgraciadamente, los bebés no vienen al mundo con un manual de instrucciones bajo el brazo. Pero tranquila, no todo está perdido.
Aunque los recién nacidos no pueden comunicarse contigo con palabras, su comportamiento y como mueven ese pequeño cuerpecito te puede dar bastantes pistas sobre si necesitan comer o realmente quieren otras cosa.
En este artículo te voy a explicar todo lo que necesitas saber para responder a la gran pregunta ¿Cómo saber si mi bebé tienen hambre?
Pero antes de eso déjame explicarte…
¿Por qué es importante reconocer las señales de hambre a tiempo?
Si te has adentrado en el mundo de la maternidad, probablemente hayas escuchado hablar de la lactancia a demanda. Es decir, a diferencia de lo que hacíamos hace 20 años, la recomendación actual es esperar que tu bebé muestre señales de hambre para darle de comer. Tanto si optas por una lactancia materna como si eliges darle el biberón.
Y es entonces cuando surge la gran pregunta: ¿Y cómo se si mi bebé tiene hambre?, ¿Espero a que empiece a llorar y le doy de comer?
X ERROR.
Tenemos muy interiorizada la idea de que un bebé llora cuando tiene hambre. Pero, debes saber que los bebés lloran por un sin fin de motivos diferentes. No solo porque tengan hambre.
El llanto es su forma de llamar tu atención y comunicarse contigo. Digamos que es una especie de comodín que les sirve para todo: lloran cuando tienen caca, cuando hacen pis, cuando quieren tus brazos, cuando tienen frío, cuando tienen miedo y no les gusta la cuna en la que le has tumbado.
En este artículo te voy a desvelar cuales son las señales que te envía tu bebé cuando empieza a tener hambre.
Responder temprano a estas señales cuanto antes evita que llegue se enfade, se ponga nervioso y empiece a llorar. Porque el llanto, querida amiga, es la última señal que te envía tu bebé.
Señales de hambre en los bebés
Cuando tu bebé tiene hambre intentará llamar tu atención. Se comunicará contigo a través de distintas señales: tempranas, intermedias y tardías. Aquí te explico cómo identificarlas:
1.Señales tempranas: «Estoy empezando a tener hambre»
Este es su primer aviso, digamos que en este punto suelen estar bastante tranquilos.
Las señales que verás en esta etapa son:
- Movimientos suaves: Gira la cabeza de un lado a otro como si estuviera buscando algo.
- Abre la boca: incluso puedes ver como saca la lengua.
- Succión: Hace movimientos de succión con la boca, incluso cuando está dormido.
2.Señales intermedias: «¡Mamá tengo hambre, por favor dame de comer pronto»
Pasamos al segundo nivel. Aquí ya empieza a impacientarse y se vuelve más activo. Se pregunta ¿en serio, dónde está mi comida?
Las señales que verás en esta etapa incluyen:
- Aumenta su actividad: Empieza moverse mucho más. Se estira y mueve las piernas y los brazos con más energía.
- Sonidos suaves: Emite sonidos como una forma de llamar tu atención.
- Búsqueda activa: Si le acaricias la mejilla, gira la cabeza hacia tu mano buscando la comida.
- Se lleva las manos a la boca: y empieza a chuparlas.
3.Señales tardías: «YA no puedo más»
Dicen que quien avisa no es traidor. Y tu bebé lleva un rato intentando llamar tu atención. Llegados a este punto, tiene hambre, se siente frustrado y está enfadado. Por lo que puede incluso resultar complicado que se agarre bien al pecho o acepte el biberón.
Lo mejor suele ser calmarlo antes y una vez esté tranquilo, darle de comer.
Las señales que verás en esta etapa son:
- Llanto intenso: Llora y su cara se pone roja.
- Movimientos desesperados: Se estira y arquea la espalda hacia atrás o mueve los bracitos rápidamente.
- Manos apretadas: Sus puños están cerrados con tensión.
Vale Sara, ya ha terminado de comer pero resulta que ahora me surge otra duda…
¿Cómo saber si mi bebé se queda con hambre?
Especialmente al inicio de la lactancia, puede ser difícil tener claro si está saciado o se ha quedado con hambre. Por eso te dejo algunos puntos clave para ayudarte a identificarlo:
Señales de que tu bebé está satisfecho:
- Cuerpo relajado: Al terminar de comer, los bebés suelen relajarse, dejan de mamar, sueltan el pecho o el biberón, y sus puños se abren de forma que las manos quedan abiertas y relajaditas.
- Sueño o calma: Cuando tu bebé se ha quedado saciado puede quedarse dormido o estar mucho más tranquilo y contento.
- Pañales mojados: Si tu bebé moja entre 6 y 8 pañales al día y hace caca de forma regular, es una señal de que está recibiendo suficiente alimento.
- Ganancia de peso adecuada: Un aumento de peso constante, evaluado por su pediatra, es el mejor indicador de que tu bebé no se queda con hambre.
Señales de que tu bebé podría quedarse con hambre:
- Irritabilidad después de las tomas: Si llora o está irritable poco después de comer, podría necesitar más alimento.
- Alimentación muy breve: En el caso de la lactancia, si tu bebé mama muy pocos minutos y llora irritado, puede ser porque no haya logrado tomar suficiente leche.
- Falta de ganancia de peso: Si su peso no aumenta adecuadamente, consulta a tu pediatra o matrona para evaluar las tomas.
- Frecuencia muy alta de tomas: Aunque la lactancia a demanda es normal, si tu bebé pide constantemente, no se suelta del pecho, podría ser un signo de que necesita más alimento.
¿Qué hacer si crees que tu bebé no se queda saciado?
Si sospechas que tu bebé podría estar quedándose con hambre te recomiendo que:
- Revisa la técnica de lactancia: Asegúrate de que el agarre es adecuado para que pueda obtener suficiente leche durante las tomas.
- Consulta a un especialista: Una matrona o asesora de lactancia puede orientarte sobre cómo mejorar el agarre durante las tomas.
- Aumenta la cantidad si es necesario: En el caso del biberón o lactancia mixta, puedes valorar con el pediatra la necesidad de aumentar la cantidad de leche.
Aquí te dejo también este vídeo del canal de youtube en el que te cuento cómo identificar si tu bebé está quedándose saciado:
Antes de terminar me gustaría desmentir alguno de los mitos más habituales sobre el hambre en los bebés.
Mito 1. «Si mi bebé se chupa las manos, es siempre porque tiene hambre»
No necesariamente.
Llevarse las manos a la boca puede ser una señal de hambre, pero también puede ser una forma de exploración o consuelo, especialmente a partir de los dos meses.
Mito 2. «Los bebés deben comer cada tres horas exactas»
¿Que pasaría si yo te dijera que tienes que comer exactamente cada 3 horas de reloj?
Pues que me mirarías con cara de esta mujer se ha vuelto loca.
Porque tal vez pasan esas 3 horas y tienes hambre. Pero tal vez no. Y a nadie le gusta comer por obligación y mucho menos sin hambre.
Con los bebés pasa lo mismo.
Cada bebé es diferente.
Algunos necesitan comer más a menudo, mientras que otros se sienten saciados durante más tiempo.
Determinar el tiempo exacto en el que tiene que comer tu bebé no es una buena práctica. Por ello, se recomiendo la lactancia a demanda. Ya que es la mejor forma de garantizar que tu bebé se está alimentando bien y se respetan sus señales de hambre y saciedad.
Mito 3. «Si mi bebé llora, siempre es por hambre»
Como te decía al principio. El llanto puede deberse a muchas razones: sueño, incomodidad, necesidad de contacto físico. Por eso es importante que prestes atención a otras señales para determinar cuál es la causa.
¿Y cómo puedo saber si mi bebé llora por hambre o porque se trata de una crisis de lactancia?
Para eso he preparado otro artículo donde te hablo en detalle de todas las crisis de lactancia, desde las que ocurren en los primeros días de vida de tu bebé hasta los dos años.
Conclusión
Saber si tu bebé tiene hambre es una habilidad que desarrollarás observando su comportamiento y señales.
Recuerda que cada bebé es único, y a medida que lo conozcas mejor, sabrás interpretar sus señales con más confianza.
¡Cuéntame en los comentarios si este artículo te ayudó o comparte tus experiencias! Si te ha gustado, no olvides suscribirte al blog para más consejos sobre crianza y lactancia.

Soy madre y matrona.
Mi objetivo es dar a las madres la información y atención necesarias para que se sientan tranquilas y disfruten de una experiencia única e irrepetible.







